Ética en un negocio de Informática

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La Stanford Encyclopedia of Philosophy[1] define la ética empresarial como aquélla que examina los principios éticos y los problemas morales que pueden surgir en un entorno empresarial, aplicándose todos los aspectos de la diligencia comercial y siendo relevante para la conducta de individuos y organizaciones. Conforme con la tesis mantenida por G. Leira[2] y C. Lamela[3], dentro de la tendencia de la extensión cada vez más acentuada de la ética empresarial al tejido empresarial de España, para el Sector Informático y de las Telecomunicaciones, en general, y el de la actividad informática, en específico, se consideran estas acciones fundamentales por la connotación económica y comercial y por la trascendencia social que estas buenas prácticas suponen en los ámbitos territoriales donde se encuentren ubicados los proyectos de emprendimiento en informática.

En esa línea, el mantenimiento de políticas de sostenibilidad proactivas, se convertirá en una línea estratégica sólida y trascendental, lo que propicia una revitalización de la sociedad y la economía bajo la premisa de una adecuada integración de empresas de informática en los sistemas económicos locales y la armonía entre los rendimientos económicos, sociales y culturales y los objetivos comerciales. En este sentido, un emprendimiento en informática sensibilizado con la sostenibilidad pondrá en marcha acciones de eficiencia energética, optimización del uso de los materiales, reciclado, etc. consiguiendo una optimización de los costes, una diferenciación con aquellas empresas que no sigan esas políticas y, sobre todo, una apuesta firme por el futuro sostenible de la sociedad.

Coincidiendo con aquella parte de la doctrina que entienden la ética laboral como una proyección de la ética empresarial, en el ámbito de los recursos humanos se deben de practicar políticas de gestión de personas que preserven la dignidad en el trabajo en el entorno de la empresa de informática, la igualdad entre hombres y mujeres, la no discriminación por edad, raza, religión o discapacidad. Asimismo, los trabajadores y trabajadoras también tienen obligaciones éticas con la persona emprendedora de la empresa de informática que van en la línea del respeto al proyecto de emprendimiento, a la cultura emprendedora y a los activos tangibles (bienes inmuebles, equipos…) e intangibles (propiedad intelectual, por ejemplo). Fuente de la imagen: sxc.hu. Imagen incorporada con posterioridad; fuente: mvc archivo propio.

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[1] Business Ethics. Stanford Encyclopedia of Philosophy. Plato.stanford.edu. 2008.

[2] Leira Landeira, G. Responsabilidad social y desarrollo educativo. Revista de Ocio y Educación. Universidad de la Coruña. 2009.

[3] Lamela Viera, C. Capital social y territorio. Biblioteca Nueva. 2014.